El Salto o Cascada del Limón, es un espectacular salto de agua que mide 55 metros de altura, terminando en una hermosa piscina natural rodeada de rocas, localizada en el parque nacional del Limón, en la comunidad que lleva el mismo nombre, provincia de Samaná, al Noreste de Republica Dominicana.
El Salto del Limón está en la profundidad de un bosque tropical y parque protegido en la península de Samaná. Esta es una excursión que nunca olvidará; para accesar desde la carretera hay que contratar burros o caballos para adentrarse en el parque, un paseo de una a dos horas a través de un verde y húmedo bosque tropical, le conducirá al pie de una impresionante cascada de 55 metros de altura. Este espectacular salto de aguas cristalinas localizado en la comunidad del Limón en las estivaciones de la sierra de Samaná, se encuentra en la península del mismo nombre. Es visitado por miles de eco turistas cada año. El Limón es probablemente la cascada más visitada y fotografiada de la isla.
Si le atrae el ecoturismo, la aventura y la naturaleza, ésta es una oportunidad que no debe dejar pasar si está en Samaná, Esta excursión toma medio día y se puede hacer en excursiones organizadas desde Samaná o Las Terrenas o puede venir de manera privada en automóvil o en motocicleta. El lugar se encuentra en la carretera Limón-Samaná justo en el centro de la Sierra, en las elevaciones montañosas. Atravesará diferentes poblados y le recomendamos detenerse y disfrutar de la amabilidad de los locales, quienes le brindaran una enorme sonrisa si se detiene a pedir direcciones o a comprar cerveza en algún establecimiento.
Nos impresiona el cambio de microclima, solo al subir algunas decenas de metros en estas lomas, aparecen musgos y líquenes, bromelias y helechos por doquier, arboles del pan y flamboyanes. Los cocotales cambian por palmeras reales y de abanico. Desaparecen los sonidos del mar y son sustituidos por el canto de los pájaros tropicales, los grillos, ranas y se eleva la humedad. Se observan algunas plantaciones de cacao y de café, propios de estas lomas. Este paseo dura una o dos horas, depende si sale de la ciudad Samaná o del pueblo de las Terrenas. Si vienen de otra parte del país, deberá sumarle las horas de viaje.
Arribaremos a las cimas de las colinas y los letreros nos anunciaran que llegamos al borde del parque nacional que protege los alrededores de la cascada y sus afluentes. Hay algunos paradores y operadores de caballos y mulos para alquiler y adentrarse en el parque. El trayecto requiere de acompañamiento de guías, por seguridad. El camino es tortuoso pero hermosos a la vez, pasada alguna media hora se llega a un parador donde el turista puede descansar y tomar una refrescante bebida en una caseta de madera mientras se prepara para caminar nuevamente por un angosto trayecto que desciende hasta la falda del salto.
El camino o sendero que lleva al Salto, usualmente está en buenas condiciones y no debe haber lodo en el mismo. El tramo del camino inclinado que desciende hacia el Salto, debe ser recorrido a pie y se baja por escalones tipo terraplén, con muro de contención de trozos de madera, además de un pasamanos de madera a un lado, para la seguridad de los turistas.
El acondicionamiento del tramo citado, como de todo el sendero, es una labor comunitaria. El camino que sube a lo alto del Salto, ubicado a la derecha en posición de subida, no puede ser utilizado dada su inclinación y los efectos de erosión que genera, el área de baño es celosamente resguardada por los guías del parque, que son parte de la comunidad de la sierra,
Una vez en la pileta al pie de la cascada, se permite el baño y nadar en ella, depende de las lluvias tendrá más o menor agua. La Cascada Limón la componen tres salidas por las que desemboca el agua que se desliza por una sólida pared verdusca, producto de los cientos de helechos y la presencia de un alto nivel de humedad de la zona. Culmina en una piscina natural formada por su agua fresca y cristalina, donde se puede disfrutar de un baño totalmente relajante. La cascada semeja una larga cabellera plateada, Le recomendamos traer agua, traje de baño, repelente para mosquitos y su cámara fotográfica. Debe venir en ropa cómoda y con zapatos casuales o zapatillas deportivas, pues recuerde que montará a caballo o sobre un mulo.
¡No debes perderte de esta aventura, Samaná ofrece mucho más que playas!
Por Eduardo Houellemont
