Cuando pensamos en Bahía de las Águilas recurre a nuestra mente una más, de las maravillas del mundo. Esta es un área protegida y esperamos que se respete sea protegida para siempre. Convertir esta área en otro polo turístico es algo que debe evitarse, y de ser así, deben participar expertos planificadores, desarrollistas que no
respondan a intereses de inversionistas públicos y privados. Lo ideal es que estos lugares paradisíacos se mantengan intactos, porque cuando se tocan o se privatizan se hacen de manera salvaje.
Bahía de las Águilas y sus playas está siendo disfrutada por visitantes nacionales y extranjeros sin tener que hospedarse en un resort, para disfrutar de este regalo de la naturaleza. Tienen la ventaja que están a estrecha distancia de Pedernales, donde
pueden encontrar hoteles y paradores con buenos precios y bien posicionados. Por ejemplo, podemos citarles entre otros de calidad, a los siguientes:
- Hotel Bahía de las Águilas.
Calle Los Atunes Nº. 1, Pedernales, República Dominicana
Tel: (001) 809 524 0574 – (001) 829 455 8615
[email protected] - Hostal Doña Chava.
Calle 2da. No.5, Barrio Alcoa, Pedernales,
Tel: (809)524-3324
[email protected] - Hotel Villa del Mar.
C/Cacique Enriquillo No.2,
teléfono (809)524-0448
En definitiva creemos que esta zona debe ser cuidadosamente desarrollada y se debe crear la infraestructura necesaria para ofertar un turismo de aventura y ecología, que ofrezca a los visitantes las comodidades fundamentales como son: instalaciones de agua dulce, conexiones de energía eléctrica, sanitarios portátiles, cabinas de duchas, recipientes de basura, vigilancia diurna y nocturna, dispensarios médicos y salvavidas.
Bahía de las Águilas es una parte integral del Parque Nacional Jaragua. Según encuestas y opiniones a nivel local e internacional, es en este lugar donde existen las playas más hermosas de República Dominicana. Sus playas son tan bellas, tan blancas y sus aguas tan cristalinas que asombran a sus visitantes.
Es un área celosamente protegida, ya que pertenece al Parque Nacional Jaragua. En Bahía de Las Águilas está aún prohibido construir instalaciones turísticas, por lo que nos encontraremos con un área totalmente virgen y sin contaminar, colmada de fauna marina y flora costera. Este lugar constituye el principal ecosistema de playa de baja energía protegida dentro del Parque.
Bahía de Las Águilas fue declarada Reserva Mundial de la Biosfera por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), y el gobierno recibió el certificado que acredita a esta zona como de importancia ecológica mundial.
En sus aguas y en las de Cabo Rojo se encuentra la mayor densidad de careyes juveniles conocidas del mundo. Esta zona se acaba de elegir en una reunión internacional como sitio de monitoreo para la región del Caribe, de esta especie críticamente amenazada de extinción.
En la zona se encuentran los arrecifes coralinos mejor preservados del Caribe, según lo ha dicho el Dr. Apperldorm, principal especialista mundial en lambí (Strombus gigas) y ecosistemas marinos, de la Universidad de Puerto Rico. Es también una zona de cría del manatí antillano, otra especie en peligro crítico.
Los estudios que se realizaron por el Ministerio de Recursos Naturales del Ministerio de Estado de Agricultura para proponer el área como protegida, incluyeron un estudio de las poblaciones y asentamientos locales. Estos estudios se realizaron entre 1981 y 1982, por el sociólogo Jesús Díaz, con inventarios de cada población existente. La inexistencia de asentamientos humanos en Bahía de las Águilas está bien documentada.
Aunque difíciles de ver, según las autoridades de Medioambiente, alrededor de la bahía, formando parte de los 1,374 kilómetros cuadrados del Parque Nacional Jaragua, se esconden unas 130 especies de aves de las que 10 son endémicas, 76 residentes y 47 migratorias.
En sus aguas abundan los corales, las estrellas de mar, las Gorgonias Pseudoterogorgia (invertebrados marinos que parecen esqueletos de arbustos) y las praderas marinas. Es posible ver tortugas carey, pues se dice que en estas playas se encuentra el mayor anidamiento del Caribe y la mayor cantidad de careyes jóvenes del mundo. Igualmente importantes son las poblaciones de iguana rinoceronte, paloma coronita, paloma ceniza, lambíes y manatíes. Plantas endémicas como la canelilla y el guanito conviven con el guayacán, el roble, el gayuco y la guazábara.
En el Parque Jaragua, establecido en 1983, también se han encontrado importantes yacimientos arqueológicos prehispánicos que registran asentamientos indígenas. En las cavernas El Guanal, La Poza y Mongó aún se pueden ver las pictografías realizadas por los taínos.
Por su gran biodiversidad, el parque fue declarado por la Unesco Reserva de la Biosfera en el año 2002, junto con los parques Lago Enriquillo y Sierra de Bahoruco. Y por otras razones la belleza de los alrededores y las pocas precipitaciones- Bahía de las Águilas
se debate desde hace años entre la lujuria de los grandes empresarios turísticos que desean construir infraestructuras permanentes en la zona y el celo de los grupos ecológicos que, como la Coalición para la Defensa de las Áreas Protegidas, aseguran que se trata de un ecosistema frágil “cuya conservación y uso público demanda de una visión de futuro y un alto sentido de responsabilidad ante la sociedad dominicana y ante el mundo”.