Miriam Veliz
No hay nada mejor que tener un buen despertar… Y qué mejor manera de empezar el día que con una invitación a desayunar y la oportunidad de hacer nuevos amigos en una agradable pastelería. Eso fue lo que tuve el pasado martes 4 de noviembre, cuando la línea aérea Copa tuvo la idea de invitar a representantes de medios especializados en turismo. Ya sé que ustedes pueden pensar que no tienen nada que ver con esto, pero cambiarán de opinión en cuanto les hable de los anfitriones. Y no me refiero solo a Claudia Zuluaga Alam, gerente general de Copa para República Dominicana y el Caribe, quien nos recibió junto a su equipo en un área reservada en la pastelería de “La Cuchara de Madera”, una agradable cafetería repostería de Santo Domingo.
Por si aun no conocen la línea aérea Copa, mientras me tomo un café capuchino sentada ante una mesa con canastas de panecillos (para romper cualquier dieta) y frutas (para cuidarnos o simplemente para disfrutarlas por dulces y fresquitas), les cuento un poquito: lo primero es que es una línea latinoamericana, estará de acuerdo en que nuestra cultura y el trato de nuestra gente, es especial; segundo, se caracterizan por su puntualidad: ¡Me dicen que es de un 90 %!, lo que la hace una de las mejores… a nivel mundial. Otro beneficio es que las amenidades en el avión aun son gratis, no se paga por los audífonos, las bebidas son ilimitadas, y el servicio de comida es ofrecido según el tiempo de vuelo, con un menú internacional preparado por expertos chefs panameños y que varía según la temporada y el lugar (un día cualquiera le pueden ofrecer un desayuno estilo dominicano, con mangú, yuquita o plátano maduro…) Ah, y además de español, su personal habla inglés y portugués (tienen varios vuelos a Brasil).
Y hablando de vuelos, su flota, joven y moderna, está integrada por 97 aviones, 18 de ellos 737-700 Boeing Next Generation (con capacidad para 124 pasajeros), cincuenta y tres 737-800 Boeing Next Generation (con capacidad para 160 pasajeros) y 26 Embraer 190 AR… (para 94 pasajeros). Además, (y de esto no se habló en el desayuno, en que se conversó de temas variados, como la imagen, la proyección, el spanglish, la prensa y los nuevos proyectos de algunos de los presentes) Copa es una de las primeras líneas latinoamericanas con “winglets”, tecnología de vanguardia que permite reducir el impacto de la resistencia aerodinámica, optimizar y hacer más eficientes sus vuelos, además de reducir la emisión de gases.
Ya sé… estoy dando muchos datos técnicos, ¿verdad?, es que como latinoamericana me siento orgullosa de los logros de esta línea aérea que sigue creciendo y a partir de diciembre estará viajando a dos nuevos lugares: Cayo Santa María, en Cuba (un hermoso destino de playa) y Campinas, uno de los más importantes sectores financieros e industriales de Brasil, un destino de negocios. Eso nos lo contó Claudia Zuluaga Alam (insisto en el segundo apellido, el materno, porque ella siempre lo usa, “es para honrar a mi madre”, me cuenta. ¡Plenamente de acuerdo, la apoyo!)
Incluyéndolos, Copa, miembro de Star Alliance, viaja a 69 destinos en 30 países: Estados Unidos, Canadá, México, Centro y Sur América, y, claro, el Caribe, donde República Dominicana sale privilegiada, pues tenemos el primer salón VIP de la línea fuera de Panamá. No lo he visitado, pero Claudia nos dijo que tiene capacidad para 200 personas, las amenidades son gratuitas.
Hay algo importante que aclarar sobre Copa: ellos operan a través de un centro de conexiones en Panamá (un hub, como más lo conocen), de modo que todos sus vuelos van al aeropuerto internacional de Tocumén, en Panamá, y desde ahí a su destino final. Sé que no nos gustan mucho las conexiones, pero con Copa no hay temor: son rápidas, fáciles, directas: usted no tiene que pasar por inmigración o aduanas, y el equipaje se documenta hasta el destino final. Claudia compara la forma en que fluyen las cosas con el trabajo de una orquesta: puede que no se sepa el nombre de todos los instrumentos, ni sepa el trabajo interno que se requiere, pero todo está tan bien sincronizado que logra una bella melodía. Todos saben qué hacer, cómo y cuándo. Y lo hacen día tras día una y otra vez, pues la perseverancia y la dedicación son las claves del éxito. Y ellos las tienen.
“Crecer duele”, dice Claudia, y ellos están creciendo. Para ello invierten en su personal y cuidan los detalles, pues no están dispuestos a arriesgar la calidad del servicio. El interés que ponen en la excelencia se nota, y viene desde la cabeza: cuando hace unos meses Pedro Heilbron, presidente ejecutivo de Copa, anunció las nuevas rutas, dijo: “Copa Airlines ha demostrado a través de los años su vocación de dar a todos sus pasajeros un servicio de clase mundial, que les permita obtener la más eficiente conectividad en todos sus viajes desde y hacia Norte, Centro, Suramérica y el Caribe”.
No me queda más que desearles a ellos lo mejor, e invitarlos a ustedes a viajar por Copa donde obtendrán un excelente servicio con sabor latinoamericano. ¡Alzo mi copa en su honor!
