Por Victoria Curiel
Cuando pensamos en Bahía de las Águilas recurre a nuestra mente una más, de
las maravillas del mundo. Esta es un área protegida y esperamos que se respete sea
protegida para siempre. Convertir esta área en otro polo turístico es algo que debe
evitarse, y de ser así, deben participar expertos planificadores, desarrollistas que no
respondan a intereses de inversionistas públicos y privados. Lo ideal es que estos
lugares paradisíacos se mantengan intactos, porque cuando se tocan o se privatizan se
hacen de manera salvaje.
Bahía de las Águilas y sus playas está siendo disfrutada por visitantes nacionales
y extranjeros sin tener que hospedarse en un resort, para disfrutar de este regalo de
la naturaleza. Tienen la ventaja que están a estrecha distancia de Pedernales, donde
pueden encontrar hoteles y paradores con buenos precios y bien posicionados. Por
ejemplo, podemos citarles entre otros de calidad, a los siguientes:
• Hotel Bahía de las Águilas. Calle Los Atunes Nº. 1, Pedernales, República
Dominicana Tel: (001) 809 524 0574 – (001) 829 455 8615
[email protected]
• Hostal Doña Chava. Calle 2da. No.5, Barrio Alcoa, Pedernales, Tel: (809)524
0332. [email protected]
• Hotel Villa del Mar. C/Cacique Enriquillo No.2, teléfono (809)524-0448
En definitiva creemos que esta zona debe ser cuidadosamente desarrollada y se
debe crear la infraestructura necesaria para ofertar un turismo de aventura y ecología,
que ofrezca a los visitantes las comodidades fundamentales como son: instalaciones de
agua dulce, conexiones de energía eléctrica, sanitarios portátiles, cabinas de duchas,
recipientes de basura, vigilancia diurna y nocturna, dispensarios médicos y salvavidas.
Bahía de las Águilas es una parte integral del Parque Nacional Jaragua.
Según encuestas y opiniones a nivel local e internacional, es en este lugar donde
existen las playas más hermosas de República Dominicana. Sus playas son tan bellas,
tan blancas y sus aguas tan cristalinas que asombran a sus visitantes.
Es un área celosamente protegida, ya que pertenece al Parque Nacional Jaragua. En
Bahía de Las Águilas está aún prohibido construir instalaciones turísticas, por lo que
nos encontraremos con un área totalmente virgen y sin contaminar, colmada de fauna
marina y flora costera. Este lugar constituye el principal ecosistema de playa de baja
energía protegida dentro del Parque.
Bahía de Las Águilas fue declarada Reserva Mundial de la Biosfera por la Organización
de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), y el
gobierno recibió el certificado que acredita a esta zona como de importancia ecológica
mundial.
Actualmente existe una disputa por la explotación turística y la construcción de
complejos hoteleros en el área.
En sus aguas y en las de Cabo Rojo se encuentra la mayor densidad de careyes
juveniles conocidas del mundo. Esta zona se acaba de elegir en una reunión
internacional como sitio de monitoreo para la región del Caribe, de esta especie
críticamente amenazada de extinción.
En la zona se encuentran los arrecifes coralinos mejor preservados del Caribe, según lo
ha dicho el Dr. Apperldorm, principal especialista mundial en lambí (Strombus gigas) y
ecosistemas marinos, de la Universidad de Puerto Rico. Es también una zona de cría
del manatí antillano, otra especie en peligro crítico.
Los estudios que se realizaron por el Ministerio de Recursos Naturales del Ministerio de
Estado de Agricultura para proponer el área como protegida, incluyeron un estudio de
las poblaciones y asentamientos locales. Estos estudios se realizaron entre 1981 y
1982, por el sociólogo Jesús Díaz, con inventarios de cada población existente. La
inexistencia de asentamientos humanos en Bahía de las Águilas está bien
documentada.
Aunque difíciles de ver, según las autoridades de Medioambiente, alrededor de la bahía,
formando parte de los 1,374 kilómetros cuadrados del Parque Nacional Jaragua, se
esconden unas 130 especies de aves de las que 10 son endémicas, 76 residentes y 47
migratorias.
En sus aguas abundan los corales, las estrellas de mar, las Gorgonias
Pseudoterogorgia (invertebrados marinos que parecen esqueletos de arbustos) y las
praderas marinas. Es posible ver tortugas carey, pues se dice que en estas playas se
encuentra el mayor anidamiento del Caribe y la mayor cantidad de careyes jóvenes
del mundo. Igualmente importantes son las poblaciones de iguana rinoceronte, paloma
coronita, paloma ceniza, lambíes y manatíes. Plantas endémicas como la canelilla y el
guanito conviven con el guayacán, el roble, el gayuco y la guazábara.
En el Parque Jaragua, establecido en 1983, también se han encontrado importantes
yacimientos arqueológicos prehispánicos que registran asentamientos indígenas. En las
cavernas El Guanal, La Poza y Mongó aún se pueden ver las pictografías realizadas por
los taínos.
Por su gran biodiversidad, el parque fue declarado por la Unesco Reserva de la Biosfera
en el año 2002, junto con los parques Lago Enriquillo y Sierra de Bahoruco. Y por otras
razones la belleza de los alrededores y las pocas precipitaciones- Bahía de las Águilas
se debate desde hace años entre la lujuria de los grandes empresarios turísticos que
desean construir infraestructuras permanentes en la zona y el celo de los grupos
ecológicos que, como la Coalición para la Defensa de las Áreas Protegidas, aseguran
que se trata de un ecosistema frágil “cuya conservación y uso público demanda de una
visión de futuro y un alto sentido de responsabilidad ante la sociedad dominicana y ante
el mundo”.